miércoles, 31 de agosto de 2011

DIES IRAE (#78)+ MARVIN HARRIS

"Te veo a través de mis lágrimas" es la expresión que Ana, la heroina de la vida, pronuncia por dos veces en Vredens Dag (Dies Irae) de Carl Theodor Dreyer, una historia de brujas en la Dinamarca de principios del siglo XVII.
La forma de mirar, desde dónde se mira, no es neutral cuando realmente se quiere comprender. Marvin Harris, principal representante del enfoque del materialismo cultural, en su "Teoría sobre la cultura en la era posmoderna" describe la distinción epistemológica fundamental que existe entre los puntos de vista emics y etics: "Debido a la capacidad genuinamente humana de ofrecer descripciones e interpretaciones de nuestras experiencias personales, las culturas pueden estudiarse desde dos puntos de vista: uno enfocado desde la perspectiva del participante y otro desde la del observador. Los estudios enfocados desde la perspectiva del participante generan descripciones e interpretaciones emics. Los enfocados desde el punto de vista del observador generan descripciones e interpretaciones etics". El punto de vista del observador es el de la comunidad de observadores científicos, cuyo conjunto riguroso de principios y metodologías, comprometidos con que la distinción entre el observador y lo observado es real, impide el desmoronamiento embrutecedor de la perspectiva etics y su fusión con la emics.
Esta distinción, muchas veces puesta en juego en el mismo arte cinematográfico (o narrativo en general), es imprescindible si se quiere afrontar de manera honesta el problema intelectual que plantea la existencia histórica de la brujería, y también el resurgimiento contemporáneo y transvalorado de la misma en forma de neomisticismos varios.

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